Desde la Plaza de la Constitución

Autor Congresistas
583 Vistas

Inés Pinillos

Se reafirmó la pluralidad política y la vocación democrática de México, incluso a regañadientes del presidencialismo reforzado y de una mayoría y dócil legislatura oficial presente en la Cámara Diputados.

La población civil toma la calle y es un suceso que ofrece varias lecturas y que no puede enriquecerse en una confrontación simplista entre grupos sino a la luz de los problemas de país que se miran irresolubles como corrupción, violencia, injusticia, salud, educación, violaciones a los derechos humanos, etc.

Por segunda ocasión en menos de un año la sociedad civil tomó la calle y se abrió la conversación por la constitucionalidad de la reforma electoral con una respetuosa solicitud al Tribunal Supremo de la Nación, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Un nuevo lenguaje abrió las posibilidades de la justicia hasta llenar una nueva conversación política por justicia salpicadas de amparos, acciones de inconstitucionalidad, recursos de ley, derechos humanos y entre estos los derechos políticos y electorales.

Para la crónica del poder van los hechos: miles de mexicanos se volcaron por la defensa del Instituto Nacional Electoras (INE) y por la intervención del del Poder Judicial de la Federación (PJF) y de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

¿Se rompió la apatía y se remontó la indiferencia de la población por la política? ¿Están en juego dos proyectos de Nación y cuáles son? ¿Se escuchó tronante la voz de un buen corte de inconformes sociales, políticos y económicos pidiendo que se cumpla con la constitucionalidad de los 24 artículos que intentan dar cuerpo legal al “Plan B” en materia electoral? ¿Perfilada una reforma corrosiva de la democracia fraguada sin la participación de la oposición y por la exclusiva voluntad presidencial? ¿Quedó claro que la otra mitad de la población se pronunció a favor de fortalecer a la democracia y moderar los embates de un discurso autoritario, y la imposición de una mayoría?

En marcha y rumbo

De nuevo decenas de miles de personas identificadas con las organizaciones de la sociedad civil y contrarias al partido oficial en las espirales de la historia democrática. Algunos analistas dijeron que faltó Zócalo y brilló Plaza de la Constitución con las ganas de miles de llenarla. ¿Es que acaso la política y lo político se volcó al interés público alimentando la frustración y el desencanto?

Recordaría el Ministro en Retiro José Ramón Cossío Díaz, orador de la manifestación que el Zócalo o sea la Plaza de la Constitución es “el espacio físico que alude a la estructura jurídica que reconoce nuestra pluralidad política y nuestra composición pluriétnica, nuestros derechos humanos como proyectos de vida a realizar, la diversidad de nuestras regiones y nuestra gente, los frenos y los contrapesos para quienes ocupan el poder temporalmente, también a nuestro sistema democrático”, se descorrían los símbolos.

Sobre la piel de los manifestantes la convicción de que “son mediante los procesos electorales previstos en la Constitución la única manera de elegir y renovar de manera pacífica todo lo que aspiramos a ser conforme a nuestro texto supremos o sea nuestra Constitución”.

Las voces

Corrió la voz del voto urbano identificado por cerca de 25 millones de personas de clase media en apoyo del INE, a la ley y en defensa del voto. Con porras de la UNAM y del Politécnico, solicitando a los 11 ministros de la SCJN la inconstitucionalidad de la reforma electoral amparando 30 años de democracia electoral.

En ráfagas de tiempo reafirmada la vocación democráticas de los mexicanos en los turbulentos tiempos de una sucesión presidencial adelantada, entre las tentaciones autoritarias y amenazando con desbordarse con el riesgo de fractura de la unión.

Y se dejan ver los atajos obscuros que sigue siendo un problema medular: la falta de representación política de los partidos en la competencia interna por los cargos populares, además de la ausencia de combate efectivo a la corrupción e impunidad.

Civismo multicolor

Orugas rosas y multicolores vibran resplandecientes en la cuadratura que domina la traza urbana y va desde la Ciudad de México a otras ciudades del país y del extranjero.

El “INE no se toca” y con la defensa “Mi voto no se roba“ describe el magno evento de abordaje de la capital del país y de un grupo de ciudades más a la de defensa del árbitro, del INE, de la democracia, pidiendo a los 11 ministros de la SCJN aplicar la Ley, la Constitución.

Como lo miles de ciudadanos que estuvieron ahí, estallan los reporteros digitales. El parte es que no se escucharon ni registraron insultos, descalificación, burla, agresiones, violencias sino la emoción de la fractura del muro de la indiferencia.

La inconformidad

A cargo de los discursos de la movilización en la que se mezclan partidos, organizaciones civiles, estudiantes, familias, adultos mayores edad, se enfatiza la cara por la justicia de la marcha con la presencia del Ministro en Retiro José Ramón Cossío y política y social con la periodista Beatriz Pagés Rebollar con la encomienda que es la petición a los 11 ministros de aplicar la Ley y la Constitución, no obstante de las presiones a la que la Corte ha sido sometida.

En los cómputos de los participantes las métricas de la asistencia formuladas a conveniencia, restas y sumas van y vienen a modo o como radiografía nebulosa y a bote pronto de las afirmaciones de que si participaron 10, 20, 50 mil o cerca de 90 mil, al corte. Los drones al aire ardiente de la mañana en el litoral de las 12, unos, formulan los resultados por densidad y por centímetro.

Abiertas las arterias digitales a la opinión reportando el sentido y ritmo de la marcha.

Tomando pulso

¿Qué tuvo que pasar para que tomen las calles las familias, lo jóvenes, las personas de la tercera edad, las mujeres, los varones, académicos, profesionales, trabajadores, niños con mascotas, matrimonios con carriola y niños en brazos? ¿Qué ha pasado en casi cuatro años para que en el rostro soporte una amarga resignación? ¿Qué mantiene la preocupación para tomar como oportunidad adherirse a la marcha?

En las agendas de reclamos sociales las danzas de los partidos políticos que se contemplan en la Constitución como organismos de interés público y para alcanzar el poder, se mantienen en la reserva de los grupos políticos, en el control de familias de poder y caciques locales y nacionales usufructuando y viviendo del poder como lacras a perpetuidad.

Hoy a 30 años de la democratización de los procesos electorales y de la creación del INE, la democracia que se resuelve en las urnas mediante el voto libre y secreto, contado por ciudadanas y ciudadanos sigue su ruta para convertirse en política pública conforme a derechos humanos y mayor participación en lo público.

Paso de marcha

Como una sola voz corrió la convocatoria a movilización ciudadana que tuvo lugar el 26 de febrero de 2023 y durante noviembre del 2022. Reforma, Juárez, Cinco de Mayo, Tacuba, 16 de Septiembre, Perú, Maderos, Allende, Balderas, 20 de Noviembre, Pino Suárez, Uruguay, las arterias que con su caudal de ciudadanos devuelven el corazón constitucional del México al centro del país que entonado por miles el Himno Nacional recibe el aliento como Plaza de la Constitución.

Entre los contingentes senadores como Emilio Álvarez Icaza, Kenia López Rabadán, Xóchitl Gálvez, Claudia Ruiz Massieu, el Presidente de la Cámara de Diputados Santiago Creel Miranda, los diputados Alejandro Moreno Cárdenas, Rubén Moreira. Se dejaron ver académicos, empresarios, profesionistas, artistas y organizadores como Fernando Belaunzarán, Jesús Zambrano.

Para la memoria de la historia de México, viejas y nuevas movilizaciones, las del obradorismo, de la sociedad civil. Y más atrás las del 68, las de médicos, ferrocarrileros.

Mensajes

En un ambiente de fiesta democrática de personas libres, dos mensajes a cargo de la periodista Beatriz Pagés Rebollar y otro a cargo del abogado José Ramón Cossío.

Así se resumen el sentir de la marcha en el apoyo al INE, a la democracia, por la constitucionalidad. No hay miedo en las multitudes en la defensa del voto y se afirma ”El voto no se roba“ corean los asistentes.

“Este es un encuentro de alegría y libertad, estamos aquí́ en el corazón de la República para defender la democracia, para insistir una y mil veces más, el INE no se toca, nuestro voto no se roba, y para decir a quien nos quiera escuchar: estamos listos para impedir un golpe a la institución a nuestras libertades. Aquí solo hay hombres y mujeres de conciencia libre, no tenemos miedo a los desplantes autoritarios que intentan callarnos. No querían que viniéramos, pero aquí́ estamos“ reitera la oradora Beatriz Pagés.

Yo defiendo al INE

Tomando Plaza

Delineado el sentir de la marcha por la democracia y por la justicia, respaldada por la voz de miles “No tenemos miedo a los desplantes de los intentos autoritarios que intentan callarnos”, dijo desde la pequeña plataforma colocada por las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México entre Palacio Nacional y el Palacio de la Justicia, cerca del Palacio del Ayuntamiento y de frente a la Catedral de México, “no querían que viniéramos pero aquí estamos” marco la liga de tensión con los aplausos de la multitud.

En el devenir diario del discurso político de la distancia con las descalificaciones y tronó el vocerío al escuchar que “el país no es de un solo hombre“ sino de todos o no es de nadie y agregar a la conversación pública que “callar nos haría cómplices de un crimen de Estado. En contra de la democracia, de una reforma electoral maquinada para hacer desaparecer al INE”.

Experimentada en las lides políticas, parlamentarias, la exdiputada federal, Pages Rebollar, tabasqueña también, alertó sobre los signos de los tiempos: “el uso de la democracia para alcanzar el poder para después“matar a las autoridades electorales” y advirtió que el “Plan B” es un fraude anunciado.

Y así Pagés Rebollar desplegaba ante la multitud los criterios, conceptos, argumentos, datos, preceptos de como precisar ante el miedo, democracia frente a autoritarismo, Constitución y ley contra ilegalidad y violación de derechos, emergencia nacional ante destrucción, populismo destructor, devastación institucional y llamado al voto como muro de contención, sentenciando a coro de que la “reforma no pasará“ llamando a la ciudadanización de la política, recuperación de las clases medias que han sido humilladas.

Pagés Rebollar denunció la existencia de populismo, ineficiencia gubernamental, de la propuesta de un “Plan B” que abre las puertas al crimen organizado, señalamientos de misoginia y asumirse, reconocer que están listos para la batalla por la democracia.

El movimiento

El ministro en retiro, miembro del Colegio Nacional, celebro el ambiente de libertad y de fiesta democrática para rechazar seguido las descalificaciones por el simple hecho de pensar distinto y también haciendo blanco del desencuentro, las consideraciones sobre las recientes reformas a las leyes electorales surgen para controlar las elecciones.

José Ramón Cossío Díaz, en mezclilla y pertrechado con un discurso de una hoja en mano subió a la plataforma colocada a un lado del edificio de la Corte, enfocado al máximo Tribunal y como representación del sector medio de la población, al que lo mismo se le tunda por sus aspiraciones.

Deslumbrado el jurista por el majestuoso escenario y la fuerza de la ciudadanía como horizonte, se describió una historia acumulada y la identidad nacional; de raíz indígena con el Templo Mayor y Virreinal con la Catedral y el Palacio Nacional, con el curso accidentado del siglo xix con sus trazos centralistas, federalistas e imperiales y republicana, en la Revolucionaria y abierto el cursos del milagro mexicano y de la etapa de la democracia, “para levantar la voz y decirle al gobierno y a sus colaboradores “mi voto no se toca”.

No hay que buscar atrás para reconocer hoy día en la sociedad civil heroicidad después de la crisis iniciada con la pandemia, diría Cossío más adelante. Y no hay razón para desconocer a un sinnúmero de héroes anónimos entre violencias, carencias y diarias batallas.

Y habló el derecho

Cossío Díaz explicó “Los hombres y las mujeres libres que estamos reunidos en diversas ciudades, hemos elegido sitios cívicos importantes para manifestarnos. Quienes estamos aquí en la ciudad de México, no solo hemos querido llenar el Zócalo, venimos a ocupar respetuosa y temporalmente la Plaza de la Constitución”. Agregó “no solo hemos querido llenar el Zócalo, repito, venimos a ocupar la Plaza de la Constitución; el espacio físico que alude a la estructura jurídica que reconoce nuestra pluralidad política y nuestra composición pluriétnica, nuestros derechos humanos como proyectos de vida a realizar, la diversidad de nuestras regiones y nuestra gente, los frenos y los contrapesos para quienes temporalmente ocupan el poder, también a nuestro sistema democrático. Los procesos electorales previstos en la Constitución son la única manera de elegir y de renovar pacíficamente todo lo que aspiramos a ser, conforme a ese texto supremo delegamos parte de nuestro poder soberano en representantes electos periódicamente. Si estos procesos, los electorales, no se realizan debidamente, una persona puede asumir, puede creer que su proyecto de Gobierno puede sernos impuesto sin importar lo que pensemos”.

Dijo con puntual claridad el sentir de rechazo de cientos miles de ciudadanos contra “la intención deliberada y consciente de la actuación gubernamental, deliberado y consciente del actual Gobierno con su mayoría parlamentaria del sistema electoral la Constitución, lo que fue impedido con la marcha ciudadana del 13 de noviembre, generando los legisladores de Morena un “Plan B”, en el que se identifican una serie de violaciones en contenidos de iniciativas y procedimientos legislativo”.

Advirtió que “se negaron al diálogo como sucede entre pares y con los ciudadanos”, además explico que “para su entrada las leyes requerían de su publicación y que con ello se romperá́ el ciclo político de las reformas”. Precisa que así la política dejara de ser el criterio central para que “hable el Derecho y los Órganos de Impartición de Justicia, por conducto de las instituciones previstas en las mismas normas jurídicas que regulan la elección de los representantes populares, mediante los cuales han aprobado las leyes que ahora pretenden imponer, desconocer el papel de la justicia, tal como lo prevé la Constitución y argumentar la mera prevalencia de la política, de un proyecto político, de un hombre que considera que su proyecto político nos puede ser impuestos a todos, implica ponerse fuera del orden jurídico que sustenta el propio cargo que ahora ocupa, así́ de simple, así́ de claro”.

El sentir de miles

El discurso en una hoja convertido en la respuesta en una lucha permanente por la democracia procedimental afinaba el enfoque hacia la democratización del poder político en riesgo de concentrarse en una sola voluntad, en un ambiente de descalificaciones, insultos y olvido del diálogo horizontal entre los actores. En las preocupaciones del mensaje el “Plan B”, considerado como una involución.

Para Cossío Díaz “a la fecha la Corte conoce ya de diversos juicios generados incluso por las impugnaciones de dos leyes del proyecto de apropiación de los órganos electorales los abusos que se presentarán con la publicación de las nuevas leyes impone y faculta a distintos órdenes y a ciudadanos el mero ejercicio de los derechos”.

Son tiempos amargos y de crisis profunda, en el marco de una sucesión adelantada en la ruta de la elección a la Presidencia de la República y de la totalidad del Congreso de la Unión conformado por 128 senadores y 500 diputados federales. Pero además en el contexto de una reforma electoral confeccionada desde Palacio Nacional, avalada por una mayoría parlamentaria oficial y sin consenso.

En un contexto complejo, inédito y profundamente crítico y trasminado por un una serie de descalificaciones la república vive un momento crítico y profundo de confrontación desde Palacio Nacional, desde la tribuna de la Cámara de Senadores y de la Cámara de Diputados, desde el conjunto de una Corte colegiada con sus 11 ministros.

La tensión crece entre Poderes, evidente el desbalance a la vista y sus riesgos de un terreno minado de descalificaciones, insultos y señalamientos de corrupción del Poder Judicial.

El valor de las palabras

No hay desperdicio en el discurso del Cossío Díaz, no hay desgaste. Sus argumentos invitan a la reflexión, no es “politiquero”. Cada frase es una eslabón de una ingeniería de justicia en las que los derechos humanos dan el sentido a la gobernanza, a la justicia. He aquí la radiografía del momento histórico que genera la publicación de las leyes como: incremento de la presentación de demandas ; agudización de críticas a ministros y a la Corte, renovados insultos a ministros, denostación del poder Judicial, acusaciones de corrupción, descalificaciones de la Ministra Presidenta de la Corte, tendencia de los ministros a defender privilegios. La lucha es la institucionalidad y la confianza en sus equilibrios.

El discurso de Cossío nos recuerda la obligada transparencia de la discusión, el peligro del alejamiento de los ministros de sus precedentes, la distorsión de las votaciones en las que participen. El presidente ha dicho que si los ministros declaran la inconstitucionalidad de las reformas, serán aliados de los más privilegiados de nuestra población, y esto no es así́. Los ministros podrían ser tenidos como defensores de los privilegios solo si debilitan a las instituciones electorales para que los poderes fácticos, la delincuencia organizada incluida, puedan determinar el rumbo de las elecciones y la conformación de nuestros representantes populares.

Te puede interesar: ¿Es pertinente una reforma electoral en este momento?

Retrato del Poder

Para Cossío, conocedor del Poder Judicial y de la Corte de la que fue ministro, “En las próximas semanas, los señores y las señoras ministras, tendrán la oportunidad de demostrarse y de demostrarnos si los calificativos presidenciales tienen o no fundamento. Tengo la confianza de que todos ellos evidenciaran que no son ciertas las expresiones del presidente y de sus colaboradores. Estoy seguro de que los ministros considerarán que las irregularidades en los procesos legislativos tienen un serio potencial invalidatorio. Sé que declararán que las normas electorales que reducen los recursos humanos y presupuestales de los órganos electorales, violan los principios de equidad y certeza. Estoy seguro de que consideraran que la fijación de los presupuestos por la Cámara de Diputados viola la autonomía presupuestal del INE. No veo, cómo los ministros podrían declarar la constitucionalidad de las reformas legales que de manera tan lamentable han disminuido los derechos políticos de las mujeres.

“Es importante que tengamos en cuenta y que en ningún momento perdamos de vista que la Suprema Corte no va a determinar de manera concreta cómo emitiremos nuestro voto, cómo será contado el voto, ni cómo se integrarán los órganos representativos resultantes de un voto libre, secreto y directo; de la suma de nuestras participaciones individuales, surgirá la composición de los órganos políticos y de ellos las normas jurídicas que regularán nuestras conductas. Los ministros, estoy seguro sabrán cumplir con el papel que la Constitución les impone, el resto es tarea de nosotros y solo de nosotros”.

Cossío se mostró seguro de que los ministros consideran que las irregularidades de los procesos legislativos tienen un serio potencial invalidatorio, que las normas electorales reducen recursos humanos y presupuestales de los órganos electorales y que los presupuestos aprobados por la Cámara de Diputados violan la autonomía presupuestal del INE.

Compromiso ciudadano

Al cierre de la jornada histórica, sellada la recomendación de renovar las mejores vías de actuación constante en las acciones políticas para la preparación y emisión del voto el día de las elecciones. Entre las tareas de reafirmar nuestra vocación democrática y construir una agenda permanente y completa para la realización integral de nuestra Constitución por sus grandes posibilidades como ruta y destacó que en la Constitución está para el avance de todos los mexicanos.

Artículos Relacionados