Jaloneos de poder

Autor Congresistas
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La mirada en el 2024 se enfoca en seis procesos electorales que van en la competencia pintando el año 2022 y agitan a los estados en donde tendrán lugar: Hidalgo, Oaxaca, Aguascalientes, Durango, Tamaulipas y Quintana Roo.

Se ofrece un año de tensiones, escándalos, lecciones políticas por el valor electoral del ciudadano y ciudadana de a pie.

En el esquema de la movilización electoral y con la mirada en la sucesión ningún proceso electoral carece de importancia para ninguna fuerza política y menos para Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), partido que controla el poder federal y 15 gubernaturas en términos presupuestales, políticos, sociales y económicos.

La competencia política ha consolidado un sistema de procedimientos electorales que han permitido la alternancia en la Presidencia de la República, una representación plural en el Congreso de la Unión, transición pacífica en las gubernaturas, los congresos estatales, las presidencias municipales, reafirmando que el voto vale, que el sufragio del ciudadano cuenta, pero quedan dudas sobre la democratización del poder y no la frustración de la democracia.

Pero además tanto el Instituto Nacional Electoral (INE) como los órganos electorales estatales han cumplido con la organización electoral y a la estabilidad política de las entidades. Surge una duda en la discusión y entre el ruido político y es la razón por la que se niega al INE presupuesto para la Revocación de Mandato y se gasta en una descentralización del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero hay que anotar que las más de las veces ciudadanos y ciudadanas no cuentan con la información, ¿Secretaría del Cultura, Salud, Medio Ambiente, ISSSTE?

El nivel y la intensidad de la competencia política viene modificando el escenario del poder, en donde cada ciudadano y un voto resulta determinante para influir en el rumbo de las políticas públicas que deben desarrollarse con la más absoluta transparencia e información y en un escenario de rendición de cuentas.

Hoy el discurso político se puebla de palabras como acción constitucional, constitucionalidad, inconstitucionalidad, controversias, impugnaciones, denuncia penal, desacato, agravios a la autoridad, combate a la corrupción, extradición, etc.

¿Vivimos una normalidad democrática? ¿La democratización del Poder? ¿Contamos con la información necesaria en la toma de decisiones? ¿Vivimos las condiciones de un buen gobierno o no avanzamos mas allá del discurso del imperio de la demagogia? ¿Hay un efectivo equilibrio de Poderes?

El Congreso de la Unión en sus dos Cámaras como también el Poder Judicial visibilizan las tensiones políticas que experimenta en distintos espacios, una, la Cámara de Diputado con su confrontación con el INE por la postergación de la fecha de la realización de la Revocación de Mandato en la que media una denuncia penal contra seis consejeros, que según el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputado, Sergio Carlos Gutiérrez Luna se niegan a realizarla con el argumento de la falta de Presupuesto.

En la Cámara Baja la mayoría de los diputados de un partido y sus aliados ha resultados avasallante para unos grupos parlamentarios de oposición que apenas se han dejado ver y sobre todo cuando estamos aludiendo a una representación popular y una alianza electoral.

Y desde el Paseo de la Reforma, la Cámara Alta, la protesta unánime de la pluralidad de los Grupos Parlamentarios por la detención del Secretario Técnico de la Junta de Coordinación Política, Juan Manuel del Rio Virgen, militante de Movimiento Ciudadano (MC) y “brazo derecho” colaborador del senador Ricardo Monreal Ávila, acusado de la autoría intelectual del crimen de un candidato a edil en un municipio de Veracruz, entidad en la que las detenciones y acusaciones sin fundamento dominan la escena política ambos eventos inéditos, ni en los 30 años de la alternancia ni en los años de los gobiernos civiles inaugurados con la Presidencia de Miguel Alemán

¿Esta politización de los asuntos públicos en los distintos órdenes de gobierno son producto de una sucesión presidencial adelantada que recibió el banderazo desde Palacio Nacional? ¿Está este trabajo sucesorio en el agravado contexto de las débiles articulaciones del sistema políticos faltó de institucionalización democrática que no ha caminado más allá de un liderazgo central y de un movimiento político que faltó de concretarse a constituirse en un partido y de partidos de oposición?

La construcción y la consolidación de la democracia del Poder público, entre Poderes, en relación con órganos autónomos, entidades federativas, gobiernos municipales, organismos civiles, exhibe sus debilidades. En sus estilos, procesos y formas de articularse entre ellos o con la sociedad se dan muestras de las tensiones políticas, revelando las fisuras políticas en la frontera del conflicto, pero también las oportunidades y equilibrios.

Hoy las dudas se agudizan y las certezas se desdibujan, el gobierno se transforma y se descentraliza ¿llegó la hora de conocer cuál es la ruta de México, a qué México aspiramos y a preguntarnos si se cumple con los derechos a la información y si se cuenta con un piso de reglas y justicia para todos, en la que coincidimos?

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