Ramiro Ortiz Cejas
Inesperadas las rutas de las construcciones legislativas que son lo mismo resultados de grupos de interés, que lo mismo exhiben maestría jurídica, dominio parlamentario, habilidades legislativas, precisiones políticas y argucias electorales y políticas.
Y es que como buscapiés cayó en las cámara de Diputados y de Senadores la iniciativa con proyecto de Decreto para reformar el primer párrafo del artículo 5 Transitorio del Decreto que deroga varias disposiciones constitucionales en materia de Guardia Nacional presentada por la diputada Yolanda de la Torre Valdés (PRI).
En plenas fiestas septembrinas tronó como castillo de luces y pólvora la alianza electoral de oposición conformada por el grupo parlamentario del PAN, PRI y PRD con un claro objetivo prolongar en la esfera de las Fuerzas Armadas el mando de la Guardia Nacional en el periodo 2024 al 2028.
Las reacciones en el estallido, las primeras las de Marko Cortés Mendoza, dirigente del Partido Acción Nacional, quien reiteró su rechazo de que las Fuerzas Armadas anden por las calles y reafirmó su rechazo a la militarización y actos dictatoriales. Sostuvo que el grupo parlamentario no apoyará ninguna reforma constitucional que extienda el plazo de duración de la Guarda Nacional.
Por su parte Alejandro Moreno Cárdenas, según la prensa nacional se reunió en secreto con el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Crescencio Sandoval en un contexto que arroja datos de que se incrementa la violencia y las preocupaciones en materia de seguridad que lastima a los ciudadanos en todo el país.
La Dip. De la Torre, sorprendió con una iniciativa que impactó y generó especulaciones múltiples: un respiro importante a la discusión en tránsito de la iniciativa a la Cámara de Senadores tras ser aprobada en la Cámara de Diputados; despresurizar una discusión que señala una ruta a la militarización de la seguridad, un impacto certero a la alianza electoral que hace blanco de los principales partidos de oposición y una carga mayor colocando en el periscopio la elecciones de los estados de México y Coahuila, la fractura interna del PRI enfocado a su dirigencia y lo que derive de un desmoronamiento inevitable de las dos únicas gubernaturas en posición de los priistas y centro el riesgo de derrumbe de sus aspiraciones.
¿Quién y cómo eligió el tiro de precisión para fracturar la “Alianza Por México” en la pista del 2024? ¿Qué motivó cerrar la posibilidad de la consolidación de la alianza con resultados electorales en la ruta de mantener para alianza hacia la gubernatura de los estados de México y Coahuila? ¿Quién consolidó esas estrategias que redujo la presión judicial sobre el presidente del PRI Nacional? ¿Quién convenció a la gobernadora de Campeche a suspender su carrusel de grabaciones que involucran al presidente del PRI Nacional en delitos de corrupción? ¿Quién abastece a la gobernadora de Campeche de grabaciones que inculpan al exgobernador en supuestos actos de corrupción y enriquecimiento ilícito? ¿A quién y a quiénes conviene en el bombazo electoral y legislativo? ¿Cómo se disponen el PRD y el PAN a competir por la Presidencia de la República, 500 diputaciones, elecciones y reelecciones en el Senado de la República?
La Dip. De la Torres, ex magistrada de justicia en el estado de Durango provocó un cráter en un partido cuya defunción es una crónica larga y anunciada. Al respecto de la iniciativa presentada sostuvo la importancia de un tema que alimenta la discusión pública que traduce como el hecho de que a partir de 2024 ni el Ejército ni las Fuerzas Armadas podrán desempeñar las tareas de seguridad pública y la certeza de que el actual gobierno ha sido un fracaso en materia de seguridad y se pregunta sobre qué es lo que van hacer los estados, gobernadores, los alcaldes sin el apoyo de las Fuerzas Armadas.
La legisladora en sus apariciones en diversos noticieros comparte sus argumentos a favor de la propuesta y refiere que las Fuerzas Armadas cuentan con el 90% de la aceptación popular. Comentó que cuando las Fuerzas Armadas se hacen presentes la gente se siente protegida y esos es muy diferente a la idea de que se quiere militarizar al país.
Convenida la legisladora sobre el origen de su propuesta y de su identificación e interés, afirmó que siempre ha sido avalada por su grupo parlamentario y el tema ha sido de su preocupación pues considera que aún no nos encontramos listos para que los policías estatales y municipales pueda, resolver el problema del combate a la violencia. Manifestó que hoy lo que se discute en la Cámara de Diputados tiene que ver con ampliar el plazo de cuatro años más y señala que el articulo 21 constitucional lo permite y en su opinión representa un tiempo suficientes de transición, asegurando que no se podrán los objetivos sin el apoyo de la Fuerzas Armadas pero también sin policías estatales ni municipales.
En el aire quedan los estallidos, contradicciones, intenciones, y las preguntas en torno a las motivaciones que impulsaron a la duranguense y cómo se vivió el anuncio de la disolución temporal de la “Alianza por México” que de inmediato corrió por las redes sociales y los medios tradicionales de comunicación.